Si derecho el buitre clavó el pico en la bola naranja fue tanta la fuerza ocupada por este que espantadas las gaviotas zarparon formando zanjas y heridas en el pequeño espacio de aire que en estos momentos sangra,Hora y clima que transan con mi conducta,
Logra hacer el truco preciso para dejar inmerso al tipo adecuado y aceptar la portentosa recompensa,
Hora traidora e ingrata que ya instalado sobre el césped trajo consigo aromas que como manjar para los dioses golpeo nuestras narices diciendo el precio de la corrupta mercancía lista a tres metros de distancia,
Pero aunque fueran diez o sólo un peso la barata frescura no podemos condenar lo que realmente debemos culpar,
la constante vigencia de nuestra mala fortuna.
Sólo diremos no y reservo la reflexión,
Sólo dirás no y eso causara estragos,
Sólo diré no y permaneceré inmerso en esta brava tarde analizando la causal de la vigencia de nuestra mala fortuna.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario